Cinco tipos de esnobs literarios

Por Camila Cienfuegos

Publicado el 26 enero, 2014

En el tren de los "mamones" hay un vagón reservado especialmente para el "mamón" literario, que no es poco a pesar de que los conductores no son precisamente los escritores sino los lectores.
Seguro que el "mamón" en las altas esferas del mundo literario es vastísimo y de proporciones inimaginables; sin embargo, ninguno de nosotros pertenece a ese círculo, por lo que creo que es más pertinente enfocarme en el "mamón" lector.
Antes de comenzar a leer esta lista tomémonos de las manos y aceptemos un hecho irrefutable: todos somos "mamones". Todos en algún momento nos hemos comportado como alguno de los esnobs que menciono a continuación. Dicho lo dicho, ¿en cuál de estas cinco categorías encajas mejor? ¿Qué otros tipos de esnobs literarios existen?

1. El que se la pasa citando autores

Todos tenemos ese amigo que publica estatus en su Facebook con citas complicadísimas de libros que nadie conoce. Todavía peor es esa persona que no conforme con publicarlo en sus redes sociales a manera de presunción pasiva habla con dichas citas y aprovecha cada oportunidad que tiene para mencionar algo que ha leído.
Si no tienes ningún amigo así, entonces probablemente el esnob seas tú.

2. El que se la vive diciendo lo mucho que lee

Primer acto: estás en un café con amigos y al comenzar a discutir cualquier tema uno de tus compinches dice algo tipo «sí, ya lo leí, es que yo leo muchísimo, me encanta».
Segundo acto: invitas a dicho amigo a salir a algún lado y responde algo parecido a «no puedo, estoy leyendo, no entenderías». Tercer acto: pare de mamar.

3. El que se pasea con sus libros bajo el brazo

Una escena muy típica en la universidad: un chico o chica con un montón de libros bajo el brazo y una mochila que se ve bastante vacía. Si te acercas, esos libros probablemente son títulos de Proust, de Kierkegaard o de algún intenso similar que te da algo así como gentileza literaria. A todos nos encanta que nos cachen leyendo algo interesante, pero no hay necesidad de forzar nada.

4. El que solo lee cosas muy elevadas

Hace unas semanas escribí un artículo sobre los cinco libros malos que hay que leer. Defiendo la creencia de que todos tenemos que leer de todo para tener un parámetro de lo bueno y lo malo, aunque no todo mundo la comparte. Seguido me encuentro con gente que considera que lo único digno de leer es algo de Borges para arriba, y no tienen ningún reparo en pregonarlo. «¿Bolaño? Ew, no, yo nada más leo a Cioran». Bitch, please.

5. El que escribe este tipo de listasSaludos.